Un legado del gobierno madurista es la reaparición de enfermedades que por mucho tiempo estuvieron erradicadas. A todas las enfermedades que han vuelto a azotar a los venezolanos, se suma «el bocio», un aumento aumento inusual de la glándula tiroidea.
El Ministerio de Salud indica que en el estado Portuguesa ya casi hay 1.000 niños afectados, y todos ellos tienen como factor común una precaria alimentación.
El exgobernador de la entidad Iván Colmenares aseguró que, según sus fuentes, ya la llegada de la patología está confirmada, y llegó de los pequeños caseríos a la capital del estado llanero.
Aunque los médicos creen que la alimentación es la principal causa de la enfermedad, se están realizando investigaciones para determinar con certeza qué origina el bocio. En un laboratorio de Valencia se encargan de detectar el nivel de yodo en agua y yodo en sal.
Los reactivos para realizar el perfil tiroideo llegaron a ese laboratorio este 19 de diciembre, más de un mes después del primer caso, registrado el 8 de noviembre.
Con información de Efecto Cocuyo
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