Con el inicio de la cuarentena debido a la propagación del coronavirus, los trabajadores de delivery en Santiago de Chile se enfrentan a un incremento de la delincuencia en la ciudad, desatada durante la pandemia.
De acuerdo con denuncias realizadas vía redes sociales, así como ha quedado demostrado en la difusión de videos de cámaras de seguridad, los jóvenes son engañados por presuntos clientes que hacen pedidos en los distintos servicios de entrega, para emboscarlos y despojarlos de su teléfono celular y el pedido que llevan en los bolsos.
«Recibí un pedido y era falso. Alrededor de las 11:00 pm me dirigí a hacer la entrega y cuando llegué me estaban esperando para robarme”, contó José Cambero a El Diario, un venezolano residenciado en Chile, oriundo del estado Carabobo.
Cambero actualmente se encuentra de reposo luego de recibir un disparo en la espalda, por resistirse al robo de sus pertenencias. Los trabajadores a su vez han denunciado que las distintas compañías (Rappi, Pedidos Ya y Uber eat) no ofrecen respuestas a los trabajadores afectados.
“Cuando ocurrió eso (el robo) yo trabajaba para Pedidos Ya (…) no les importa hacia dónde nos dirigimos, y si llamamos al cliente para confirmar el pedido nos sancionaban. Debes llevarlo ajuro, si no te cierran la cuenta”, comentó Cambero.