Esta semana podría estrenarse el nuevo “ajuste cambiario” para la Vicepresidencia Económica y el gobierno, la “devaluación lineal” para economistas y gente de oposición, y en fin, el “alza desmedida de precios” que deberá soportar común del venezolano. La medida, según los entendidos en la materia ya está tomada, y poca gente sabe por qué la misma no fue lanzada el pasado lunes, debido a que venía rondando desde el viernes. Y deberán hacerlo, debido a que las finanzas oficiales al cambio de la tasa Sicad I o preferencial de 6.30, ya no aguanta la presión de las deudas y más que eso, de los compromisos vencidos y a los cuales los han dejado “stand bye”, porque sencillamente no hay con que hacerles frente, es decir que las divisas se han esfumado y no fueron a parar a las misiones, debido a que a estas les deben y la mayoría de las obras oficiales que se están construyendo están paralizadas… lo que no se entiende.
Por poner un caso, al sector privado se le adeudan 10.750 millones de dólares, luego de haberles otorgado dos millardos de dólares, que canceló el gobierno a sectores de la industria nacional, entre alimentos, farmacéutico y químico, pero representan alrededor deun 16% del total adeudado.
De allí que los responsables de las finanzas, anden buscando como locos un “fast credit”, crédito rápido en los mercado chino o ruso, porque tiene cerrado los tradicionales mercados de dinero, después de tanto insulto, querella y amenazas. De conseguirse esos dolaritos posiblemente irían a aminorar los sectores automotriz, aéreo, salud e infraestructura…
No obstante debe aclararse que los pagos parciales que hace el Ejecutivo no responden a serios cronogramas, que lespermitan comunicarle a los proveedores externos con certeza, en qué plazo se les va a cancelar, por lo que estos exigen pagos de contado, pues sencillamente no hay confianza en la economía venezolana.
Este cúmulo de factores, pues evidentemente no traen nada bueno. Y la famosa y tarareada “unificación cambiaria” se traducirá en sencillamente una hiperinflación, que viene galopando a carrera tendida, sin tener nada que la detenga. Pero esa medida de la relación/costo Dólar Vs. Bolívar no quedaría allí, aparte de la escasez y la especulación que nunca faltan en circunstancias como estas.
Vienen medidas complementarias, que contribuirán aún más a que se disparen como cohete, los precios de los productos, sean de primera o última necesidad, alimentos o repuestos, medicamentos o papel, y servicios comunes, como agua, luz, teléfono, gasolina, lo que desembocará en una muy estrecha calle inflacionaria, por donde deberán pasar los ingresos, que desde salario mínimo hasta sueldos de profesionales,se verán mermados y que al final, quizás ni lleguen a la esquina próxima, hasta esperar que reponganla quincena.
Esto es un alerta, sobre la amenaza del costo de vida que se viene encima y sin poder hacer algo, ya que ni que se hagan manifestaciones, marchas, paros protestas y demás, ello es inevitable. Y ello es lo que tiene aguantado al gobierno, que ahora en medio de tanta crítica y autocrítica tendrá que tomar decisiones que lo pueden acercar a su inmolación.
En realidad surgen interrogantes al respecto. ¿Cuándo lo hará?, ¿Cómo hará para contener las protestas?, y ¿Será que lo dejará para el viernes 11 de junio, víspera de los juegos de semifinal y final del Mundial de Fútbol?
Con información del portal Tal Cual