El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) pretende conseguir votos en las próximas elecciones del domingo 21 de diciembre, utilizando una nueva imagen, pero sin abandonar su discurso amenazante.
Algunos candidatos como Georgette Topalián, aspirante a la alcaldía del municipio Baruta del estado Miranda; Héctor Rodríguez, a lo gobernación de Miranda o Freddy Bernal, en el estado Táchira, ha declinado se vestir el tradicional “rojo, rojito” durante el desarrollo de su campaña electoral y optaron por usar tonos en color azul, verde e incluso tonos pasteles.
Esta estrategia política busca acercarse más a los electores que no militan en el partido del régimen y así sumarlos en su búsqueda por una victoria en las elecciones regionales y municipales.
“En unos circuitos donde claramente nunca va a ganar el oficialismo, como son los municipios caraqueños, pues se disfrazan de lo que no son. Y en otros donde el chavismo no está tan mal visto, se quitan el rojo pero conservan los ojitos de Chávez, que tiene un jalón muchísimo más fuerte que el madurismo”, agrega Carmen Beatriz Fernández, experta en comunicación política.
Los candidatos del régimen no dejarán de lado la imagen construida por el fallecido presidente Hugo Chávez porque les da legitimidad, es por ello que aún siguen utilizando los característicos “ojos de Chávez” durante su campaña política.
“Nunca van a abandonar la figura de Chávez, porque es lo que le da legitimidad al movimiento. Pero, al final, su proyecto era más ideológico. Creo que Maduro se dio cuenta que el país no va a ser viable así. Entonces, intenta ampliar su base con un mensaje de coexistencia, dirigido a los grupos que anteponen su calidad de vida por encima de la política”, explicó el politólogo Ricardo Sucre Heredia.
Además los candidatos continúan utilizando el discurso político como el bloqueo impuesto por los Estados Unidos, la guerra económica y las conspiraciones.
“La estrategia discursiva del Madurismo ha sido culpabilizar a las sanciones internacionales de la caída de la economía venezolana. Pero el mismo pueblo venezolano se reinventó y aprovechó la dolarización de facto. El gobierno lo ha visto y lo está dirigiendo a su eslogan proactivo. Responde a una lectura sobre el comportamiento de las personas”, añade el profesor Eduardo Valero-Castro.
Redacción Maduradas con información de Tal Cual Digital